Historia musical de la Banda de la 2ª Comandancia Móvil de la Guardia Civil de Eritaña

Cofrades de Arahal. Se puede decir que son los padres del estilo que hoy día denominamos como "Agrupación Musical", aunque como ya veremos más adelante esta denominación la crea otra formación. Hoy día, de todos modos, el estilo de "Agrupación" es también conocido como el estilo "Guardia Civil", gracias a ellos.
Nace esta banda durante los años cuarenta en Sevilla, en el cuartel de Eritaña que hoy día sigue en funcionamiento en la Avenida de la Borbolla en unos terrenos aledaños al Parque de María Luisa. Fue el subteniente Martín el que crea una revolución en la música concebida para pasos de Cristo, al añadir a los instrumentos normalmente usados por las bandas militares (cornetas y tambores), otros como trompetas, trombones, saxofones y platos.
Durante los años 60 y obligado por un mando superior que era de origen gallego, incluye también gaitas.
Todo esto hace que la banda gane en riqueza musical y que ahora se pueda desarrollar más la creatividad del Subteniente que comienza a componer gran parte de su repertorio y que adapte a la misma cantos litúrgicos como "Perdona a tu pueblo" o "Alma mía". Hay quien también afirma que otro canto eclesiástico como es el "Cantemos al amor", fue también adaptado por ellos, aunque de este último término no tengo certeza, ya que otras fuentes citan que fue Arahal quien la adaptó por primera vez.
La popularidad que alcanza esta banda es tal, que para poder hacer frente a la multitud de contratos para los que son requeridos en Semana Santa deciden dividir la banda hasta en tres. De esta forma la banda, compuesta normalmente por unos sesenta componentes pero que en la Semana Mayor llegaba a cien, cumplía sus compromisos con una plantilla de unos treinta y tantos músicos cuando tenían que dividirse. Así llegaron a acompañar a cofradías como; San Roque, La Hiniesta, La Paz y La Estrella el Domingo de Ramos. Las Aguas y el Beso de Judas el Lunes Santo. San Benito el Martes Santo. Las Siete Palabras y Los Panaderos el Miércoles. La Exaltación el Jueves Santo. Madrugada en Los Gitanos, Esperanza de Triana e incluso en la cruz de guía de la Macarena. El Cachorro el Viernes Santo y el Sábado abriendo paso en el Santo Entierro.
No sólo eran famosos por su música, también, como no siendo una banda militar, por su marcialidad desfilando y por la vistosidad de sus uniformes. Solían portar el típico uniforme verde con tricornio de charol negro, trinchas y cinturón del mismo color y gala roja y gualda. A partir del Jueves Santo, llevaban traje de gran gala de la época fundacional, siendo azul con bocamangas y cuello rojo y cinturón y tricornio con detalles dorados.
Sus marchas, gracias a Dios, se pudieron recoger en un trabajo discográfico de la casa Pax en 1972. Como curiosidad, comentar que esta grabación se hizo en el salón de actos de la Universidad Laboral de Sevilla. Las marchas que formaron parte de este disco fueron: Macarena, Marcha lenta por campanilleros, Estrella, Alma mía, La Santa Espina, Saeta, Compasión, Semana Santa, Esperanza, El Alba, Consolación, Perdona a tu pueblo, Presentación, La Salve y Cristo de la Buena Muerte.
Según parece, en dicha grabación se interpretaron unas veinte marchas, pero la casa discográfica eligió estas quince para la composición del disco, por lo que quedaron sin publicarse marchas como Lágrimas o La Portuguesa. En una reciente grabación de la Agrupación Musical Ntra. Sra. De los Reyes, homenajeando a esta banda, ha visto a la luz una composición desconocida a la que no ponen título (Inédita). 

 

 

 

 

 

En 1975 se desintegra la unidad móvil que se traslada a Logroño, donde parece ser se halla gran parte del instrumental usado por la banda a excepción de unas gaitas que siguen conservándose en el cuartel de Eritaña con mucho cariño, ya que fueron regaladas por la Hermandad de la Estrella.
La Banda de la Guardia Civil, fue por lo tanto la precursora del estilo más sevillano que se conoce de acompañamiento musical para nuestras cofradías. Se dice que todo ello fue gracias al tesón de sus componentes, que incluso sacaban tiempo fuera de su horario de servicio, para ensayar y de esta manera perfeccionarse, logrando ser el referente musical sevillano por antonomasia.