Fran Granado. De nuevo el agua ha hecho aparición en un evento cofrade. El
día no apuntaba buenas maneras por mucho que queramos los cofrades cambiar los
pronósticos. La plaza de Molviedro estaba preparada para vivir el acto que la
Hermandad de Jesús Despojado nos había preparado. Un certamen digno de las
Bandas y Agrupaciones que regalarían sus sones a los aires de Sevilla. Y un
presentador D. Rafael González Serna que en cada introducción que nos regalaba
nos ponía en la palma de sus manos, por la hermosura y la expresividad de sus
palabras.
La Banda de Cornetas y Tambores de Nuestro Padre Jesús
Cautivo de Sevilla capital fue la encargada en abrir el XIII Certamen de Bandas “Jesús Despojado”. Llegó desfilando
como todas a la plaza y ya subida en el escenario escuchamos como la Semana
Santa está aún más cerca, despuntaron marchas entre azahares y callejuelas para
dejar paso a la Centuria Macarena. Centuria es inmensamente querida en Sevilla,
siempre en su estilo, con fuerza y armonía, con sones que saben a Madrugá y a la
Sevilla más rancia.
El Certamen seguía los pasos predestinados y subió al
escenario… “Arahal, La Madre y Maestra de las Agrupaciones” como dijo Rafael
González (presentador del evento). Un momento inenarrable el vivido por los
presentes. La Agrupación Musical Santa María Magdalena empezó a tocar y solamente
con las voces de metal, Rafael nos regaló una presentación que pasará a la
historia de todos los cofrades. “Dios de Esperanza” era la pieza elegida para
atragantarnos y saborear ese pellizco en nuestro estómago. Nos mecimos con “Caridad y Misericordia” y sin darnos cuenta teníamos presente al Cristo de la Buena Muerte con “Cristo de San
Julián”. Nos fuimos a pisar La Campana y volver a los años setenta con “Alma de
Dios”, pero la verdadera Alma de Jesucristo, la que llevamos todos los que
vivimos aquella época en nuestros corazones. Alma de Dios sonó en Molviedro entre flautas y xilófonos. Y la
gente enmudeció, el tiempo se paró, nos hicimos niños recordándonos en brazos
de nuestros padres y abuelos. Y Sevilla entera lloró, pero desde el cielo hasta
la tierra.
La Agrupación para despedir su paso por el certamen nos tocó
“Himno de San Antonio” también a sones de flauta y xilófono, pieza que muchos
de los presentes en el acto recuerdan y asimilan a bellos recuerdos de muchos
momentos vividos. Impresionante y sin palabras…
Se pudieron ver caras conocidas en este mundo musical que
tanto queremos y a la vez respetamos, aplaudiendo sin parar. Seguro pensando
que por esto, lo vivido en el día de hoy, muchos años atrás se hicieron amantes
de la música, compositores de renombre, pregoneros de postín y un largo etc.
Y apareció el agua, agua la cual ya nos estamos
acostumbrando a tener entre nosotros en los diferentes actos, tanto públicos de
Fe Católica, como cofrades. El evento se suspendió para el día 16 de marzo que
continuará con la Agrupación Musical Virgen de los Reyes y la Banda de Cornetas
y Tambores del Santísimo Cristo de las Tres Caidas.
Video facilitado por Aromas de Incienso