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Fco. Fdez. Gracía. El sábado 22 del último mes de este año 2012, dia en que tradicionalmente desde horario matinal estamos pendientes de las bolitas con números grabados y que salen de esa gran esfera dorada, llamada bombo de la lotería.
Día en que nos ilusionamos en haber si abandonamos esa tiesura crónica que nos asola. Este dia se citaron sobre la vertical de ese sitio que se llama Bodegón Plaza Vieja, de este pueblo denominado Arahal, los componentes de la llamada todavía Agrupación Musical Nuestra Señora de la Victoria de Arahal, dicha cita se concretó para cuando en horario después del mediodía, la aguja pequeña de ese maldito aparato llamado reloj se para en el numero dos y la aguja grande se para sobre el numero doce. El mencionado lugar del acto, templo del mollate y del buen comer en Arahal, en la década dorada de los 80.
Al llegar los amantes del viento metal y la percusión se encontraron con una escena maravillosa, en primer lugar, una chimenea encendida en la cual ardian unos troncos de centenarios olivos de nuestros parajes, leña que ardía sobre un lecho de rescoldos, los cuales, desprendían una temperatura ideal para la fiesta. Se encontraron también unas mesas repletas de ricas viandas, como salazones y encurtidos, destacando las olivas y las delicias de entrepiernas, vulgo salaitos, ademas de unos triángulos isósceles del producto manchego por excelencia, queso por supuesto, los aliños del más maravilloso de los tubérculos, la papa en su versión aliñada, y como nó, los productos de ese maravilloso animal, mamífero, omnívoro de de nariz chata, rabito rizado y de andares simpáticos, gran devorador del fruto de la encina (bellota es emblema de la famosa Sierra de Huelva), osea, el cerdo. No lo sigo describiendo porque se me esta haciendo la boca agua; todas estas viandas sirvieron como entrantes del plato estrella, un suculento arroz con carne, de un animal de las familias de los roedores, de hocico largo y orejas suaves y alargadas, de piel suave y cola de tacto algodonosa, animal rápido y hábil, familia del famoso Bugs Bunny, hablamos del rico conejo de campo. Todos los manjares fueron regados con cerveza y a una temperatura correcta en todo momento y diferentes caldos, al finalizar se paso a las bebidas de alto poder calórico, solas o debidamentes combinadas.
Y para acabar un poco de música con motivos chirigoteros o carnavalescos.
Día en que nos ilusionamos en haber si abandonamos esa tiesura crónica que nos asola. Este dia se citaron sobre la vertical de ese sitio que se llama Bodegón Plaza Vieja, de este pueblo denominado Arahal, los componentes de la llamada todavía Agrupación Musical Nuestra Señora de la Victoria de Arahal, dicha cita se concretó para cuando en horario después del mediodía, la aguja pequeña de ese maldito aparato llamado reloj se para en el numero dos y la aguja grande se para sobre el numero doce. El mencionado lugar del acto, templo del mollate y del buen comer en Arahal, en la década dorada de los 80.
Al llegar los amantes del viento metal y la percusión se encontraron con una escena maravillosa, en primer lugar, una chimenea encendida en la cual ardian unos troncos de centenarios olivos de nuestros parajes, leña que ardía sobre un lecho de rescoldos, los cuales, desprendían una temperatura ideal para la fiesta. Se encontraron también unas mesas repletas de ricas viandas, como salazones y encurtidos, destacando las olivas y las delicias de entrepiernas, vulgo salaitos, ademas de unos triángulos isósceles del producto manchego por excelencia, queso por supuesto, los aliños del más maravilloso de los tubérculos, la papa en su versión aliñada, y como nó, los productos de ese maravilloso animal, mamífero, omnívoro de de nariz chata, rabito rizado y de andares simpáticos, gran devorador del fruto de la encina (bellota es emblema de la famosa Sierra de Huelva), osea, el cerdo. No lo sigo describiendo porque se me esta haciendo la boca agua; todas estas viandas sirvieron como entrantes del plato estrella, un suculento arroz con carne, de un animal de las familias de los roedores, de hocico largo y orejas suaves y alargadas, de piel suave y cola de tacto algodonosa, animal rápido y hábil, familia del famoso Bugs Bunny, hablamos del rico conejo de campo. Todos los manjares fueron regados con cerveza y a una temperatura correcta en todo momento y diferentes caldos, al finalizar se paso a las bebidas de alto poder calórico, solas o debidamentes combinadas.
Y para acabar un poco de música con motivos chirigoteros o carnavalescos.
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